ARTICULOS DE MIS EQUIPOS

                     MI VIDA EN EL ATHLETIC

1º MI VIDA EN EL ATHLETIC 

Siempre pensé en escribir un libro y contar todas mis experiencias deportivas. Ahora que se habla de casos como el de Llorente y se están haciendo comparaciones y sobre todo que muchos me pedís mi opinión, creo que ha llegado el momento de contaros mi historia desde el inicio. La verdad, la real con pelos y señales, contada en primera persona, con todo tipo de detalles. La historia real de un chaval que siempre ha llevado con orgullo el nombre del Athletic y el de la ciudad de Bilbao por todos los sitios donde ha estado. Hoy os contaré mi vida de niño, hasta que aterricé en el club de mis sueños.

Nací en Deusto (Bilbao), aunque siempre vivimos en San Adrián. En una familia humilde. Mi padre trabajaba en la recepción del hotel Excelsior y mi madre en el polideportivo de Artxanda. Tanto mi hermano Patxi como yo nos sentimos orgullosos de nuestros padres y del esfuerzo que hicieron para sacar la familia adelante y que no nos faltara de nada.

En aquella época las opciones eran fútbol o fútbol, así que desde que tengo uso de razón nuestras vidas giraban en torno a un balón. Con 11 años en un torneo en Lezama nos llamaron: ¡qué alegría recibir una carta del Athletic diciendo que deseaban hacernos una prueba para entrar en las categorías inferiores! Fuimos creo recordar los primeros jugadores en llegar al Athletic después de Urkiaga tras pasar por todas las categorías del club.

Mi padre era socio del Athletic y nos inculcó esa afición, la ilusión de cualquier chaval es la de jugar en el equipo de su tierra, la nuestra poder hacerlo en el Athletic. Mi madre fue la gran artista y artífice de nuestro éxito, siempre pendiente de todo. Fundamentalmente de que estuviéramos bien alimentados. Estaba obsesionada con las legumbres, verduras y frutas, incluso recuerdo que siempre antes de marcharse a trabajar a las 6 de la mañana,venía con un gran vaso de zumo de naranja y una cucharada de miel natural, de esas de granjas. Nos la daba y ella a trabajar y nosotros a seguir durmiendo hasta las 7 y media, que era la hora  de levantarse. Los fines de semana nos levantaba a las 6 de la mañana para desayunar: zumo de naranja, huevos fritos con jamón, fruta y un vaso  de leche con galletas y miel. Que no faltara la miel, mi madre estaba obsesionada con la miel y sus propiedades, después marchábamos en tren o autobús, porque no teníamos coche, por todos los pueblos de Bizkaia para competir en carreras de cross (mi hermano fue campeón de Bizkaia). ¡Qué palizas de viajes! Íbamos dormidos a correr y luego a jugar al fútbol. Nuestros padres siempre estuvieron encima de nosotros para que fuéramos constantes, para que no abandonáramos. Por eso, este pequeño homenaje a nuestros padres.

Imaginaros a niños de 12 años yendo a entrenar a Lezama, tres días por semana, desde San Adrian (un barrio de Bilbao que en aquella época no estaba bien comunicado). Sé que parecerá impensable lo que os contaré. El autobús salía desde San Mamés, pasaba por Deusto y a Lezama, y luego a la vuelta lo mismo, nosotros cogíamos billetes de tren en la estación del arenal que no estuvieran picados, para luego a la vuelta poder coger gratis el tren en Deusto para que nos llevara  al arenal, y desde allí el autobús a Torre Urizar ya que en aquella época San Adrián era un barrio aislado (como os he contado anteriormente). Aunque la mayoría de los días subíamos andando por San Francisco y Zabala para ahorrarnos el autobús,a pesar que no eran  barrios apropiados para que paseasen niños de esas edades.  Esto lo hicimos desde  los 12 hasta los 17. Seguramente muchos pensaréis (sobre todo las madres) que hoy en día sería imposible, pero nos teníamos que buscar la vida ya que el Athletic no nos pagaba ni un duro, El Athletic pagaba los viajes a todos los jugadores que vivían fuera de Bilbao. ¡Vaya incongruencia! Pagaban los viajes a los que vivían en Santurce, Somorrostro ….. etc y en cambio a nosotros que teníamos muchas mas complicaciones no nos daban nada. Y eso que buena falta nos hacía, pero que le íbamos a hacer. Fue imposible hacerles cambiar de opinión, dijeron que 'no' y tema zanjado.





La semana que viene os explicaré con detalles mi recorrido hasta llegar al primer equipo.

2º ESCALANDO POSICIONES

Mi hermano y yo fuimos subiendo categorías. Yo siempre marcaba goles y lo hacía con cierta facilidad, pero en juveniles lo pasé bastante mal. En esta categoría puedes jugar con compañeros y contra rivales de diferentes edades. En mi primer año de juvenil, no jugaba de titular. Estaba un poco desmoralizado. El entrenador era Gonzalo Beitia siempre le estaré agradecido,por todas las horas que estuvo trabajando conmigo y por toda la confianza que me dio durante ese tiempo. Un día me dijo: 'Julio, no te preocupes. Estoy seguro que tú serás el delantero centro del Athletic"., siempre he tenido una gran confianza en mí mismo, pero aquellas palabras me reforzaron aún mas, así que a seguir trabajando.

Estudiaba en Askartza Claret, en Leioa, y cuando acabe 3º de BUP, cuando tenía 16 años, me surgió un trabajo de auxiliar administrativo. Tenía que tomar la primera decisión  importante de mi vida: seguir estudiando COU y después una carrera o compaginar el trabajo con el fútbol. Eran tiempos complicados. Mi familia hacía un gran esfuerzo para podernos pagar este colegio que era privado. Al final me puse a trabajar y así colaboraba un poco.

Mi horario era de 9 a 13 y de 16  a 20. Mi madre se levantaba a las 6 de la mañana para ir a trabajar, se había sacado el carnet y se compró un Seat 600, así que a esa hora me llevaba al trabajo,prefería eso que dormir una hora mas y luego tener que coger dos autobuses, llegaba y me leía los periódicos y avanzaba trabajo ya que no había internet ni nada parecido. Me dejaban salir una hora antes para ir a entrenar, así que tres días a entrenar y los otros dos iba a una academia a estudiar mecanografía y contabilidad.

Yo estaba feliz, era muy afortunado, tenía un trabajo que me gustaba, tenía dinero (cosa inusual en un chaval de 17 años) y encima jugaba al fútbol. ¡Qué más se puede pedir! Pasó un año y el Athletic me propuso que fuera a entrenar mañana y tarde a Lezama. Querían que por la mañana entrenara con el Bilbao Athletic o incluso algunos días solo, para mejorar el remate de cabeza y aspectos técnicos y por la tarde con mi equipo, el juvenil nacional., otra vez tuve que tomar una decisión. No me lo pensé y me lo jugué todo a la carta del fútbol,ya se que era muy arriesgado pero siempre me han gustado los retos,y mi madre siempre me decía que hay que luchar por lo que uno quiere,y yo quería jugar en el Athletic. Tenia 17 años para en setiembre hacer 18, veía que había posibilidades de hacer realidad mi sueño. Así que dije que sí.

Así  que cada mañana bajaba andando a San Mames, (casi media hora de caminata) y allí me recogían Andoni Goikoetxea y Angel Maria Villar, una semana con el Renault 5 de Villar y a la siguiente con el Seat 131 de Goiko. Entraba en el coche, decía "egun on" ("buenos días") y no hablaba en todo el recorrido., ellos hablaban del equipo ,de la A.F.E  etc y yo alucinaba,para mi era un sueño.Al salir, les decía "eskerrik asko" y "agur" ("gracias" y "adiós"). En aquella época, les veía como dioses, impresionaban, parecía que no estaban a mi alcance. Años más tarde, recordaba esas vivencias ya que coincidí con Andoni  en el Athletic, ademas compartía habitación en Lezama, también en el Mundial de Mexico 86, y luego volvimos a coincidir en el Atlético  de Madrid. ¡Qué grande es Goiko en todos los aspectos! Detrás de esa imagen de jugador duro hay un tipo extraordinario y  con Villar, que sería el presidente de la Federación  cuando yo jugaba en la Selección y que lo sigue siendo a día de hoy, vaya anécdotas.
Pero vayamos a lo importante, a los entrenamientos. Muchas veces entrenaba solo con Gonzalo Beitia, rematando y rematando. Otras con el Bilbao Athletic. Luego comía con los porteros,  Iribar, Cedrún, Meléndez, Aguirreoa… si ¡Con el Chopo! Pensar que para mi Iribar era como si a un niño le dices que coma cada día con Leo Messi,  como se cantaba en aquellos tiempos Iribar, Iribar es cojonudo como Iribar no hay ninguno,en aquella época también estaba Andoni Zubizarreta ,así que imaginaros  al Julio Salinas que habla hasta por los codos, que es extrovertido, pues en aquellos tiempos todo el día mudo,desde que subía en el coche con los 2 cracks, entrenando solo con Gonzalo y luego a comer sin abrir la boca y por fin a la cama a esperar 2 o 3 horas, echando la siesta , recordando todos esos momentos de la comida y a esperar para entrenar con el equipo. Fue duro, cada día solo, muchas horas sin saber que hacer. Y bastante cansado.

Todo iba bien,seguía una buena linea, cumplí los 18 años y llegó el problema de la 'mili'. No sabíamos si esperar a los 21 años o anticiparnos y solucionar este problema para que no cortase nuestra trayectoria. Así que tanto mi hermano con 17 y yo con 18, decidimos hacerlo voluntario, aunque para ello sacrificáramos muchas cosas y tiempo y ademas hiciéramos casi 24 meses en lugar de los 12 que nos correspondían.

Fue esa época donde tuvimos que pedir permiso para que nos dejaran ir a jugar la final de la Copa del Rey juvenil contra el Real Madrid. ¿Os acordáis de aquel gol de Michel por fuera de la red que el arbitro concedió gol? después de una temporada magnifica con Nico Estefano de entrenador, con todo lo que nos había costado llegar al Vicente Calderon,pues todo se derrumba por una decisión arbitral, allí  buscando en la red el agujero por donde había entrado el balón y el arbitro Miguel Perez diciendo que nos dejáramos de tonterías,que poca psicología, como nos íbamos a inventar una cosa semejante. Vaya palo! ¡Qué manera de llorar! Allí, rapados, llegando en taxi a Madrid desde  el cuartel, siempre acompañado de mi mejor amigo, mi hermano Patxi. siempre juntos desde que nacimos.
Ese año también  debutamos en Segunda b, ya que en alguna ocasión nos llamaron para jugar algún partido con el Bilbao Athletic, el entrenador era Javier Clemente y en aquel equipo creo recordar que estaba entre otros el actual entrenador del Osasuna Mendilibar , y ya en la temporada 81-82  pasamos al Bilbao Athletic por fin  firmé mi primer contrato profesional , 751 y 2103 euros por dos años con el filial. No era mucho pero con 18 años me sentía afortunado, ya que luego llegaría la oportunidad de jugar en el primer equipo.




                    HACIENDO LA MILI MI HERMANO PATXI Y 2 AMIGOS DE GRANADA

SEGURO QUE CONOCEIS A UNOS CUANTOS,FALTA MI HERMANO

Pero de mi debut con los 'mayores' y de mi etapa en San Mamés ya os hablaré en el siguiente capítulo



3º MIS AÑOS EN EL BILBAO ATHLETIC

Cuando subimos al Bilbao Athletic, Javier Clemente también lo hizo al primer equipo y como entrenador coincidimos otra vez con Gonzalo Beitia. Luego serian  Iñaki Saez y José Ángel Iribar los que se harían cargo del Bilbao Athletic, En estos dos años en el filial, seguí progresando y ya pude debutar, en octubre de 1982, con el Athletic. Perdimos contra el Zaragoza 2 a 1 pero a la semana siguiente ganamos en casa contra el Atlético de Madrid. ¡Vaya subidón! Mi primera prima. Creo que eran unos 700 euros. El club decidió renovarme y firmé un contrato de tres años (1983-1986) y las cantidades eran 4.800, 7.800 y 18.000  euros respectivamente, las que se daban a los jugadores que subían al primer equipo.

En aquellos tiempos, casi todos los viajes en el Bilbao Athletic se hacían en autobús, en avión sólo nos desplazábamos a las Islas Canarias. Era el viaje que nadie quería perderse, ya que lo aprovechábamos para traer regalos (relojes, cámaras, grabadoras, vídeos) más baratos para la familia y los amigos.

Los desplazamientos en autocar no eran como ahora. Para ir de Bilbao a La Coruña podías tardar hasta 12 horas. No había las autovías  ni las autopistas de ahora, pero me lo pasaba en grande ya que siempre me han gustado los juegos de mesa y las cartas, como buen bilbaíno. A mí, los viajes se me pasaban volando. A la vuelta, bocadillo, un par de piezas de fruta, agua, y otra vez al naipe, hasta que llegabas a casa a las tantas de la madrugada.

En Lezama hay unas instalaciones fantásticas, en mi época había unas 12 habitaciones y allí se concentraba el Athletic. Cuando subí al primer equipo me pusieron en la habitación con Andoni Goikoetxea. Sí, aquel que me llevaba en coche cada día de la semana. Todos los equipos se concentraban el día anterior al partido, nosotros con Javier Clemente todo lo contrario, después de los partidos. Tenía su explicación ya que lo mas importante era recuperar después del partido, pero algunos de  nosotros también nos concentrábamos el día anterior, y eso también tenia una explicación.

Íbamos a dormir a Lezama con los solteros de aquella época, De la Fuente, Elguezabal, Urtubi, y alguno como Urkiaga que tenía una hija pequeña y prefería descansar bien, así que allí nos juntábamos en el Jan Toki con Javi y Jose, con los que siempre había buen ambiente. El Jan Toki es un restaurante que está a 500 metros de las instalaciones y donde siempre después de los entrenamientos se tomaba un aperitivo antes de irnos para casa. Todavía recuerdo el postre de flan con arroz con leche, y a dormir, sino te sorprendía Urtubi con alguna inocentada. Era capaz de hacérsela al propio entrenador, por eso dormías con la puerta cerrada y con el seguro bien puesto.

Al  día siguiente venían los compañeros, comíamos en Lezama (¡qué bien nos trataban!) y al partido, y luego vuelta a Lezama a cenar y a jugar la partida. Éramos una familia. El  propio Javier Clemente también jugaba, eso sí, siempre pendiente del jabalí (Urtubi) para que no te hiciera una de las suyas. 

Me compré un coche, un Opel Kadett 1600, que lo pagaba a letras ya que me costó 9.000 euros. Fue mi primer coche y estaba como un niño con zapatos nuevos. Recuerdo que cuando entré en el concesionario casi me echan. Imaginad a un crío entrar en un coche y empezar a mirarlo y a tocarlo todo, con pantalón vaquero, zapatillas… Seguro que el comercial pensaría “a ver si este chaval me destroza algo…”. También recuerdo que nos fuimos de vacaciones a Santo Domingo y al año siguiente a Río de Janeiro, con Urtubi, De la Fuente y  De Andres . ¡Vaya cinco pipiolos! Claro, nosotros dos no estábamos en ese nivel y además nos habíamos comprado el coche, pero recuerdo como De Andrés nos decía que fuéramos, que no nos íbamos a arrepentir y que si no nos llegaba el dinero él nos haría un préstamo. En aquella época viajar era mucho mas complicado y más caro, no había tantas facilidades y tantas ofertas como ahora, pero había que cargar pilas, habían sido temporadas duras, todo había salido bien, habíamos ganado la Liga , así que después de pensarlo decidimos disfrutar de unas vacaciones que nos habíamos merecido ,así que invertimos toda la prima que nos dieron por ganar la liga y nos la gastamos en esos viajes., Además, nunca habíamos viajado a no ser con el equipo, escuchábamos a Miguel (De Andrés) que para nosotros era como nuestro hermano mayor y nos contaba viajes que él había realizado. Así que no había que darle mas vueltas, era una oportunidad que había que aprovechar y nos decíamos a nosotros mismos que era una inversión de cara a la temporada siguiente. Como curiosidad, en Río un día fuimos a ver un partido a Maracaná y al entrar en el autobús estaba López Ufarte. La rivalidad seguía en Río. ¡Qué pedazo de futbolista! Fue un placer jugar con Roberto después en el Atlético de Madrid.

En las temporadas 82-83 y 83-84 alternaba los dos equipos. Entrenaba con el Athletic y luego jugaba con los dos, aunque más con el filial. Fueron años magníficos para el Athletic, pues ganamos las dos Ligas y la Copa 83-84. En la 82-83, yo conseguí el Pichichi (23 goles) con el Bilbao Athletic y además subimos a Segunda A; y en la 83-84 volví a conseguir el Pichichi en Segunda A con 23 goles sin notar la diferencia. El único pero es que nos robaron el título de Liga en Segunda A, digo robar porque así me lo pareció. Fue otro mal trago en mi carrera.

Os explico. Quedamos empatados a puntos con el Castilla de la Quinta del Buitre y nos ganaron por el gol average. Pero hubo un partido que habíamos ganado al Cartagena 3 a 1  y que un mes más tarde nos hicieron repetir. Dijeron que por alineación  indebida de mi hermano Patxi, ya que había disputado más de 10 partidos con el primer equipo y si jugabas esta cantidad de partidos no podías bajar al filial. Pero eran partidos de Liga y mi hermano los había jugado en la Copa del Rey. Al final, tuvimos que repetirlo en un campo neutral en el campo del Rayo Vallecano (Vallecas), ya que estaba a la mitad de camino de los dos equipos, lo empatamos y por ese punto no ganamos el campeonato de Segunda. No sé si el Athletic protestó lo suficiente pero yo lo hubiera llevado a los tribunales. La verdad es que nadie lo comentó, quizás porque tampoco interesaba mucho para ellos el hecho de quedar primeros o segundos en esa competición. A nosotros sí que nos interesaba ya que era una rivalidad que venía de juveniles.










La próxima semana os comentaré mis dos años consecutivos como titular indiscutible del Athletic 


4º SUEÑO CUMPLIDO: TITULAR DEL ATHLETIC

Nunca olvidaré la primera liga, era impensable que un equipo de jóvenes, no sé si éramos leones o aldeanos como decían algunos en plan cariñoso, pero de chavales, con un entrenador que parecía un jugador mas, ya que era el mas joven en aquella época, podían ganar una Liga. Hacía 27 años creo recordar que el Athletic no la ganaba y teníamos esa oportunidad y yo tuve la suerte junto con mi hermano de ir al ultimo partido contra Las Palmas. Pensaba que sería  imposible ganar la liga ya que para conseguirla teníamos  que ganar a un equipo que se jugaba el descenso (Las Palmas) y que el Valencia ganara al Real Madrid. El Valencia, un equipo que aunque ganara casi seguro que bajaba a Segunda División.

Estábamos  en el banquillo y empezamos perdiendo 1 a 0 con gol en propia meta de De Andrés. Se ponía  fea la cosa, pero luego remontamos y empezamos a marcar goles. Al final ganamos 1 a 5, solo faltaba el milagro de que el Valencia marcara algún gol, y se cumplió. Tendillo firmó ese gol que sirvió  para que el Valencia se salvara y  nosotros ganáramos  la liga. Además, tuve la suerte de jugar unos minutos y disponer de una buena ocasión para marcar. ¡Qué alegría! No lo creíamos, no nos podíamos  ni imaginar ese recibimiento de toda Euskadi. Cada vez que veo las imágenes  me emociono ya que ibas en la gabarra y nunca había  visto tantos barcos y barcas acompañándonos y tanta gente a ambos lados de la ría. Y luego en Bilbao, la explosión  final. Calculaban un millón  de personas, yo pensaba, pero si no hay tanta gente en Bilbao. Fue increíble, una pasada.

Nosotros tuvimos la suerte de repetirlo, fueron años maravillosos ya que estábamos  viviendo una época gloriosa, ya que en las 5 temporadas con Javier Clemente en el banquillo del Athletic conseguimos  un 4º puesto,2 campeonatos de liga y acabamos  3º en las dos últimos años, con una Copa del Rey ,una Supercopa y una final perdida, solo faltaba ser titular, sentirme protagonista, coger el papel  principal, ya que no es lo mismo cuando ganas y eres titular a si lo haces siendo un jugador con un papel secundario. Si en tu curriculun figuraran esas ligas y esas copas pero cuando juegas esa final de Copa de titular y la ganas la alegría es si cabe mas intensa y eso ocurrió en la temporada 84-85. Fui galardonado con el león de oro de El Correo como al mejor jugador del año así como del periódico Deia, a ver si sabéis ¿quién me entrego el trofeo?
Eran trofeos que te hacían mucha ilusión, cada lunes puntuaban y daban  3 puntos al mejor del partido y luego 2 puntos y 1 punto, y al final de temporada te entregaban ese león que veis en la foto y una carabela en el otro periódico. Ahora es diferente, pero os puedo asegurar que eran trofeos a los que les dabas importancia. Fue una gran alegría ganarlos por delante de Goikoetxea y mi hermano Patxi que quedo en  tercer lugar, todo salió bien en mi primer año como titular. Otra cosa son las valoraciones que hacían de cada jugador, en lo que a mí respecta siempre ponían "voluntarioso pero…" y aquí muchas cosas,  luego en cambio Javier Clemente me decía lo contrario ("eres un mingafría, a ver si coges la garra de tu hermano Patxi"). Lo mismo sucedía con los trofeos veraniegos, todos queríamos ir a los dos trofeos más importantes (Teresa Herrera y Carranza), eran trofeos que esperabas que te llamaran cada verano para jugarlos, te hacía mucha ilusión, no había giras por Asia, América ni nada parecido. E ir a Coruña y Cadiz era que te tocara la lotería, y todos deseábamos ganar esos pedazos de trofeos.


 Ese año también recuerdo episodios que te hacen madurar,eran tiempos difíciles y había llegado el momento de reivindicar  derechos, de pasada ya vivimos esta experiencia en el 81 cuando se reclamaban entre otras cosas /seguridad social,abolición del derecho de retención y los limites de edad para jugar en 3ª División , luego en el 82 hubo un amago pero los futbolistas tuvieron miedo y al final se desconvoco, pero en la del 84 había que arreglar las cosas, una jornada se jugo con juveniles,los clubs no pagaban,había muchas deudas  etc, luego se decidió jugar después de las promesas de arreglarlo,siempre promesas,yo hubiera ido hasta el final, ya que creo que perdimos una buena oportunidad de solucionar bastantes de los problemas que tenía  y que tiene el fútbol,, pero entendía la situación de compañeros con familia a su cargo y que tenían miedo ya que muchos estaban amenazados por sus clubs , no era nuestro caso ya que el Athletic siempre pagaba al día y respetaba las decisiones que el equipo tomaba

Me costó mucho hacerme un hueco en el equipo titular, en otras circunstancias lo habría conseguido mucho antes ya que fui Pichichi de Segunda B  y de Segunda A, pero en el Athletic jugaban unos cracks, una alineación que todos los aficionados recordaran de memoria,  Zubizarreta - Urkiaga-Goikoetxea-Lizeranzu- De la Fuente-Gallego-De Andrés - Urtubi -Dani -  Sarabia - Argote,  acompañados por Menéndez -Sola -Nuñez-Noriega-Bolaños- los jóvenes -Endika ,Arrien-y los hermanos Salinas, como veis una plantilla de 20 jugadores para intentar repetir los éxitos y competir en todas las categorías, y además como podéis comprobar jugando con tres delanteros. Así que ese sistema ya lo utilizábamos durante toda la época de Javier Clemente  y claro en mi posición tenía ni más ni menos que al trío Dani - Sarabia - Argote, casi nada, y luego a  Endika que marcó el gol de la final de Copa del 84 contra el Barcelona y que nos dio el triunfo, y que estaba por delante  nuestro.

Pero siempre tuve la confianza del entrenador y él había decidido que era el momento del relevo, de introducir cambios en el equipo,  ese año hubiese sido perfecto si no fuera por la derrota de la final de Copa contra el Atlético de Madrid. Aquí sí que fui titular, era mi primera final como jugador del Athletic en primera división, también jugó mi hermano Patxi que ya había disputado la anterior. Jugamos en el Bernabéu, siempre nos gustaba jugar en ese campo, y no nos importaba que el rival (el Atlético) fuese de esa ciudad ya que no sé cómo pero siempre hay más aficionados del Athletic. Es la Copa y tiene esa magia, pero perdimos por otro error del mismo árbitro que nos pitó en juveniles y que concedió aquel gol de Michel  por fuera de la red (Miguel Perez ). En esta final nos pitó un penalty cuando el balón había dado en el travesaño. Otra final perdida, otra decepción a pesar de que marqué un gol en aquel Atletico, 2-Athletic, 1.

La temporada 85-86 empezó igual y los reyes magos me trajeron un buen regalo ya que el seleccionador Miguel Muñoz me convocó el 22 de  Enero del 86 para jugar un amistoso en Las Palmas contra Rusia. Todavía había  tiempo para hacerse un hueco en ese Mundial de Mexico 86, es verdad que había muchos jugadores pero a mis 23 años ya tenía la experiencia de jugar en un equipo campeón y las ganas de un chaval que empieza y que quiere comerse el mundo. Además siempre he tenido una gran confianza en mí mismo para hacer cualquier cosa (hasta me atreví con el programa 'Mira quien baila'). Estaban Butragueño, Eloy, Carrasco, Rincón… así que tenía que aprovechar la oportunidad. Fui titular, ganamos y marqué un gol. Antes del Mundial hubo otros dos amistosos, ambos los ganamos y en ambos marqué un gol. Tenía un puesto para ese Mundial y de titular junto a Butragueño.

Pero la felicidad no podía ser completa y tuvimos que pasar otro episodio desagradable, los problemas entre Sarabia y Clemente, hicieron que en enero del 86 justo después de venir de mi primera convocatoria el Club decidiese dar la baja al entrenador, el equipo quería seguir unido ya que os puedo asegurar que el ambiente era fantástico, pero en la grada había pañolada en cada partido y jugar así era complicado, hicimos que la directiva rectificase y admitiese de nuevo a Javi en el equipo e intentamos por activa y por pasiva que cambiara de opinión , que volviese con nosotros , lo intentamos de todas las maneras posibles ya que lo necesitábamos y para el equipo era algo mas que un entrenador, ya que fueron 5 años maravillosos y con unos resultados increíbles que nadie hubiese soñado, pero nos dijo que si volvía ya no seria el Javier Clemente que habíamos conocido , no seria ese entrenador con ese carácter  y esa personalidad, lo entendimos y supimos  que se acababa el ciclo, se hizo cargo Iñaki Saez del equipo hasta final de temporada , pasamos esa situación como pudimos, quedamos terceros y llegamos a la semifinal de Copa pero el equipo ya no fue el mismo, se vislumbraba que venían tiempos difíciles para el Athletic


           Estadio Insular en Las Palmas el día en que nos proclamamos campeones de liga 1982-1983

                        En la sub 21 en la que coincidi con mi hermano patxi, en Torremolinos




                              En el Ayuntamiento de Bilbao, ¿Cuantas personas había ? ni se sabe

El proximo capitulo sera el ultimo, os contaré los detalles y negociaciones de mi renovación con el Athletic  


5º MI ADIÓS DEL ATHLETIC

Acababa contrato y en diciembre me llaman para renovar. Yo era el jugador peor pagado de la plantilla por delante de mi hermano Patxi y me ofrecen un contrato de unos 42.000 euros. Estas cantidades siempre son brutas, no como ahora que hablan de netas. En aquella época los impuestos rondaban el 50 por ciento. Pero no era una cuestión solo de dinero. ¿Por qué siendo uno de los jugadores con más futuro, titular junto a Zubizarreta y Goiko,  indiscutibles en la Selección, tenía que ser otra vez el  peor pagado? Me llamó Javier Clemente y me dijo: 'Chaval que pasa, ¿por qué no renuevas?' Yo estaba asustado, era un crío. Le expliqué la historia, sonrío. Me imagino que no daba crédito a lo que le contaba y se marchó. Pero luego lo echaron a él. Fue un palo para mi carrera, ya que fue el entrenador que me subió al Bilbao Athletic y años más tarde al Athletic. Fue un entrenador al que lincharon continuamente por convocarme en la Selección; un entrenador que en Chicago era capaz de darme ánimos, cuando estaba hundido; un entrenador que siempre me ayudo, defendió, y confió durante toda mi carrera; un entrenador al que considero amigo y al que siempre le estaré agradecido. Gracias, Javi.
Yo era feliz, mis sueños se habían hecho realidad, jugar en el Athletic y hacerlo junto a mi hermano Patxi , igual que luego años más tarde hacerlo en la selección, siempre juntos, siempre unidos, solo quería un gesto de reconocimiento. Un futbolista hace lo que más le gusta, jugar al fútbol, y de paso intentar ganar dinero para buscar lo mejor para tu familia y en mi caso, intentar que mi madre dejara de trabajar y pudiera tener una vida mejor, e intentar comprar un piso como así lo hicimos años después en el mismo barrio, siempre en San Adrián, pero con ascensor ya que en el que vivimos toda la vida no lo tenía y era un quinto piso. He de reconocer que nos vino bien subir tantas escaleras ya que potencias las piernas y es un buen ejercicio, subir y bajar cinco pisos no sé cuántas veces cada día, que si bajas la basura, que si has de comprar el pan, que a comer... ¡Y las subíamos de tres en tres! Cuantas veces me acuerdo de Piru Gainza y las cosas que nos decía, y una era referente a caminar, a subir escaleras y dejarnos de ir siempre en coche, incluso para ir a comprar el periódico, ya que decía que ir en coche te quitaba años de fútbol. ¡Qué razón tenía!

Luego estaba el tema deportivo. En aquella época, el Athletic era un equipo ganador, en mis cuatro años en el primer equipo se ganaron dos Ligas, una Copa del Rey y una Supercopa, llegamos a otra final de Copa que perdimos contra el Atlético de Madrid, y luego dos terceros puestos más en la Liga, es decir, siempre luchando por los campeonatos. Y encima tenía el apoyo de los entrenadores. Más no podía pedir, solo algo que creo que me merecía ya que no pedía nada del otro mundo. Para que os hagáis una idea, en aquella época Butragueño renovó con el Madrid y se hablaba del grupo de los 100 millones de pesetas (600.000 euros) y yo cobraba 3 millones de pesetas (18.000 euros) no me gustan las comparaciones pero creo que había un desfase enorme y que me merecía algo mejor.

El Athletic era un equipo campeón, que luchaba por el campeonato. Nadie se había marchado del Athletic, ya que no te podías ir a no ser que se pagara como el caso de Garay, Alexanco... Pero aquel año se produjo un hecho insólito, que permitía irse cuando se acababa un contrato. Yo no marqué muchos goles esos años a pesar de que jugué bastante bien. El último año fueron solo 4 y ademas tenían a Argote, Sarabia, Dani, Noriega, pero estaban en su recta final. No se dieron cuenta de este aspecto y los jóvenes Arrien y Endika al final tampoco dieron lo que se esperaba. En definitiva, viendo que era imposible hacerles cambiar de opinión y muy a mi pesar, en una decisión  muy dolorosa y muy difícil de tomar, decidí separarme de mi hermano y de mis padres e irme a Madrid.

Imaginaros qué lloros en casa. Mi madre me decía que intentara llegar a un acuerdo, que estábamos todos juntos y que separarme de mi hermano no era lo que ella deseaba, pero era imposible hacer recapacitar a alguien que no quiere escuchar. Hacías lo que ellos decían o no había nada más que discutir. Y me fui, sabiendo el poder que tenían respecto a la prensa, que me venderían como así fue de pesetero y traidor. Con unas frases que hacían  daño, sobre todo a mis padres y a mi hermano, que eran los que se quedaban en Bilbao. ¡Cómo sufrieron por mí! Quizás nunca me di cuenta de tanto sufrimiento, pero mi hermano lo aguantó como pudo, hasta el punto de que cuando renovó con el Athletic años más tarde exigió que me dieran la insignia de oro y el cuadro de Pichichi que dan a los jugadores que cumplen 100 partidos y que a mí no me lo habían concedido a pesar de que pasé de esa cifra. ¡Vaya hermano! ¡Qué crack! Siempre defendiéndome, desde que era un crío y también de adulto. Gracias por todo hermano. Luego a él también  le echaron, con contrato en vigor, siendo capitán, y haciendo una gran temporada ya que había sido designado por el periódico Deia como el mejor jugador  de la temporada. Pero los dirigentes cometieron otra vez un error, como así  lo reconocieron años más tarde. Pero esto sería para otro capítulo. 

Así que volvamos a lo anterior, era imposible luchar contra eso, hay mucho forofo que solo quiere ver  lo que le interesa. Siempre he sido del Athletic, soy socio del Athletic, pero nunca he sido un pelota, siempre he sido sincero y honrado, quizás  por ello me han despedido o no me han dejado entrar en algunos medios, no lo sé, pero siempre desde el respeto, y siempre cuando hablo del Athletic lo hago porque me importa, igual que a un hijo cuando le llamas la atención por hacer algo que crees que no es lo adecuado pues igual con el club, si no no lo haría, como no entro en profundizar en otros clubs que no me importan en absoluto. Pero si veo algo que no me gusta hay que decirlo, si no cumplen con sus promesas, si meten amigos dentro del club y despiden a buenos profesionales, si cogen entradas a saco y luego me quitan la que me tocó en el sorteo, si dejan sin entradas para la final a jugadores que ganaron Copas y Ligas, si traspasan a Aduriz cuando para mí es un jugador extraordinario... Pero que nadie piense que es desde el rencor, qué equivocado está, siempre le estaré agradecido al Athletic por todo lo que me dio, por todo lo que aprendí como persona, valores que intento transmitir a mis hijos. ¡Cómo voy a tener rencor! El Athletic es mucho más que las personas que lo dirigen. Aquellos se equivocaron, me atacaron y dijeron muchas mentiras para desprestigiarme. Eso es verdad, aunque nunca sabes si me hicieron un favor.

Incluso hace poco en mi etapa en La Sexta, un ex jugador dijo en una televisión local que como podía ir a retransmitir un partido vestido del Barcelona. No daba crédito. Un ex compañero decía que yo era del Barcelona y que era una vergüenza  y una humillación para los socios del Athletic. Quiero aclarar que claro que también soy del Barça, siempre lo he dicho, y lo digo con orgullo, ya que este club me ha dado mucho, mi mujer y mis hijos han nacido en Catalunya y los catalanes me han tratado y me siguen tratando con un cariño que siempre les agradeceré. Como siempre digo, tengo un padre y una madre y a los dos los quiero, pero que no digan que no quiero que gane el Athletic. Yo iba con un jersey que tenía un montón de colores y que entre ellos  estaban el azul y el grana, pero también amarillo y negro, y se atrevía a decir en una televisión todas esas chorradas. Tuvo que intervenir mi hermano, una vez más, y llamar al programa para que no engañen a la afición, cosa bastante corriente ya que ésta no se entera ni de la mitad. Ahora, con las redes sociales, ya es otra cosa.

Se ha comentado mucho que yo no quería al Athletic y que hay otros jugadores que sí han demostrado el amor al club, perdiendo dinero y cosas parecidas. Puede que sea cierto, no lo voy a discutir. Podríamos entrar en cada caso, pero yo os puedo asegurar que me hubiese conformado con el cinco por ciento de esos contratos o el de las personas que no me renovaron, algunos de los cuales tenían contratos indefinidos y con indemnizaciones millonarias. Por eso escribo este artículo. Para que de una vez por todas quede aclarado. Y que si el aficionado me quiere criticar, que lo haga sabiendo la verdad, que sepa lo que sentía, todo lo que se le pasaba por la cabeza a un niño en aquella situación y cómo viví aquellos momentos, que os puedo asegurar fueron bastantes duros, y que no os podéis ni imaginar lo que sufrió mi familia. Estuve a punto de volver muchas veces, una de ellas estando en el Atlético de Madrid, pero forzaron demasiado  la cuerda una vez mas, ya que no se conformaban con un cambio de cromos sino que además querían dinero en la operación. Pero esto será, si queréis, para otro capítulo.





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               MI VIDA EN EL ATLETICO DE MADRID (1986-1988)


1: MI LLEGADA AL ATLETICO

Así que me tocó hacer las maletas y marcharme en dirección a Madrid. “¡Vaya palo!”, pensé. Siempre he sido de decisiones meditadas pero rápidas, es verdad que un poco egoístas ya que viendo la cara de mis padres era todo un poema. “Tranquilos”, les decía, “Si solo estamos a cuatro horas de coche y volveré muchas veces”, en definitiva  todo ese rollo que siempre se comenta. 
Pensé que sería muy duro sobretodo dejar a mi hermano, ya que siempre estuvimos juntos, en el colegio, con la cuadrilla (mismos amigos) y hasta en la mili, siempre unidos e inseparables, no os podéis imaginar como lo echaba de  menos.

Afortunadamente, me comunicaron que no iría solo, que me acompañarían Peio Uralde y Rubén Bilbao, con el que había coincidido durante mis años en el Athletic. Monté en mi Opel Kadett rojo y a Madrid, tuve suerte de ir con estos dos amigos que me hicieron la vida más fácil.

La pretemporada se hacía en Segovia. El entrenador era Luis Aragonés y el preparador físico Ángel Vilda. Había oído hablar como todos de Luis, de cómo defendía y apoyaba a los jugadores. Tuve la mala fortuna de que en esa pretemporada no tuve tiempo para conocerlo, se puso enfermo y se tuvo que marchar. Su sustituto fue Vicente Miera, a quien había tenido unos meses antes en el Mundial de México 1986 como ayudante de Miguel Muñoz.

En Segovia empecé con todas las ganas del mundo, pero cuando empezamos a entrenar me dije: “Julio, igual te has equivocado ya que no sé si podrás soportar estos entrenamientos”. Siempre la pretemporada es dura y cuesta ya que vienes de vacaciones, y eso que en Bilbao se trabajaba y se daba mucha importancia al aspecto físico, pero lo del Atlético no lo volví a ver nunca, qué manera de correr, que manera de hacer series, parecíamos corredores de 10.000 metros y que nos preparábamos para una olimpiada.
Yo preguntaba a Arteche y compañía si eso era normal y me contestaban: “Majo, espera que todavía no hemos comenzado”. Yo pensaba que estaban de guasa, ya que correr más era imposible. Yo tenía 23 años y siempre he sido fuerte en el aspecto físico, así que pensé “si yo estoy así como estarán los demás”. 
Al final pensé en hacerme el loco por esos bosques e intentar escaquearme pero acababa de llegar, me tenia que ganar un puesto, dar buena imagen, ademas todavía no sabia como funcionaba el club y encima el mister tenia mucho carácter e impresionaba pero muchas veces tuve ganas de pararme sobretodo cuando veía a algún compañero detrás de un pino, escondido y me hacía señas como diciéndome " anda tira para adelante que me vas a descubrir" 

No os podéis imaginar qué alegría cuando acabó todo ese infierno, fueron las peores pretemporadas de mi vida como profesional. Siempre a nivel de trabajo, ya que el ambiente entre los compañeros era buenísimo, como no podía ser de otra forma con los Arteche, Marina, Landáburu, Setién, Quique Ramos, Alemao, Elduayen, Silva…etcetc  Teníamos un gran grupo.

Por suerte volví a jugar el Teresa Herrera (ya os conté en mi vida en el Athletic que era mi torneo favorito) y con el Real Madrid de rival. Casi nada. Yo venía del Athletic y ya teníamos rivalidad contra ellos, aunque cuando aterricé en el Atlético me di cuenta de lo especiales que eran los derbis y de la gran rivalidad que existía,
Yo ya había ganado el torneo con el Athletic en 1983 y el debut con el Atlético fue inmejorable: 3 a 1 con gol mío incluido y después triunfo en la final sobre el Sao Paulo por 1-0. Nos invitaron a una cena espectacular de marisco en Santiago de Compostela para celebrarlo.





2º DONDE Y CON QUIEN COMPARTIR PISO ? 

“Vaya equipazo que tenemos”, me repetía una y otra vez, “podemos hacer cosas interesantes este año”, añadía para mí mismo. Volvimos a Madrid y teníamos que encontrar piso, decidimos irnos a vivir juntos (¿Quiénes? ¿Uralde y Bilbao?) y nos aconsejaron Las Rozas, donde conocimos a Toñi y Maribel de Pablo,dos hermanas con las que hicimos una gran amistad. Es una zona residencial con urbanizaciones muy bonitas, vivían algunos jugadores del Real Madrid como Michel, creo que Gordillo y alguno más. Apostamos por un piso amplio en el que cada uno de nosotros tuviera su habitación con baño, y también claro está por el precio ya que estos chalets eran bastante caros y para empezar era lo más aconsejable hasta que conociéramos la zona. Tuve suerte jajaja ya me tocó la mejor habitación,eso si no me acuerdo a que nos la jugamos pero seguro que juegue con ventaja jaja,tener en cuenta que era en principio para años así que la apuesta era muy importante. Nunca  olvidaré la calle Pozito de las Nieves, ¡qué buenos momentos pasamos allí! Tuvimos el acierto de encontrar una señora que nos trataba como si fuéramos sus hijos, nos limpiaba la casa, imaginad qué desorden tres chicos viviendo allí. Nos preparaba la comida. Por cierto qué bien cocinaba,por eso quiero agradecer desde este blog a JUANITA por todo el cariño que nos dio y por eso viendo tal chollo no me extraña que se apuntaran a comer Rodolfo y Quique Setién. A cambio como nuestro piso no tenía piscina de vez en cuando nos íbamos de ‘ocupas’ a la de Setién, que tenía de todo… Era el precio por la comida, la relación era fantástica…Dicen que la convivencia es difícil, quizás tengan razón, pero yo lo pase genial, y eso que éramos totalmente diferentes.

 Uralde era el más veterano, tenía 28 años,tenia unos golpes buenísimos, era muy tranquilo, para mí demasiado, aunque te das cuenta de que la vida te la tienes que tomar con esa tranquilidad. Te daba seguridad pero algunas veces  me desquiciaba. Os pongo un ejemplo: entrenábamos a las 10.30, si tenemos 30 minutos al estadio pues habría que salir a las 9.30 como muy tarde, ya que en estas ciudades el encontrar caravana o accidente entra dentro de lo normal. Yo me levantaba a las 8.30 y desayunaba y veía que nadie se levantaba y que pasaban los minutos. Llamaba a su habitación y me decía: “Tranquilo Julio que hay tiempo y a las 9.40 se hacían su café y empezaban a desayunar. Yo me ponía de los nervios y ellos me decían: “No te pongas nervioso que vamos de sobras”. Es verdad que creo que nunca llegamos tarde, o casi nunca por si la memoria me falla y Ruben era un trozo de pan,un chaval fantástico.

En aquellos tiempos, el Atlético no tenía las instalaciones deportivas actuales, así que bajábamos a entrenar al Vicente Calderón. Teníamos una media hora de coche, si no encontrabas las caravanas que antes os he mencionado. Todo iba sobre ruedas, desde que llegamos todo fueron facilidades. En aquella época estaba de presidente Vicente Calderón y os puedo asegurar que nos trataron de maravilla. No cabe duda de que estaba en un gran club, solo faltaba que tuviera suerte en los inicios.Llamaba por teléfono a mis padres y a mi hermano Patxi (no había móviles) y en casa había atasco cuando llegabas para coger el teléfono y llamar, ya que éramos tres y todos lo necesitábamos. Era un teléfono con contador  y cada uno apuntaba los que utilizaba. Rubén el primer año y Eusebio el segundo se llevaron la palma, qué manera de hablar por teléfono, cómo se notaba que eran los que tenían novia y tenían que hacer las llamadas correspondientes… El teléfono sacaba humo y cuando acababan era ya tan tarde que no llamabas porque estabas viendo una película o porque  pensabas que ya estarían dormidos. ¡Vaya pedazos de facturas! No había tarifa plana…Mi hermano me decía que todo iba bien, me daban ánimos pero realmente los que necesitaban esos ánimos eran ellos ya que yo estaba en el cielo, en un gran club, con grandes compañeros, vivía en un sitio privilegiado y con dos grandes amigos como Rubén y Peio, que me hacían la vida muy fácil y en una gran ciudad. Pero mi hermano y mis padres estaban soportando todo tipo de críticas y comentarios que yo en aquella época no fui consciente ya que vivía en mi mundo y no me daba cuenta por lo que estaban pasando. Qué ingenuo era, aunque creo que lo sigo siendo ya que muchas veces vamos a lo nuestro y quizás tendríamos que mirar un poco a los lados para ver a los demás, sobre todo cuando son seres que tanto nos importan y son por los que tenemos que luchar.






CAPÍTULO 3: 24 horas con la prensa

Volviendo al equipo, me encontré con un grupo sensacional, después de los entrenamientos quedaban en un bar al lado del Vicente Calderón y allí nos tomábamos unas cervezas con unas aceitunas, es decir, hacíamos el aperitivo. Esto creaba un buen ambiente, ya que siempre había un grupo que lo hacía y de allí a comer los 5 mosqueteros (Rodolfo,Setien,Peio,Ruben y yo), en aquella época los medios de comunicación (a ver qué decimos de los medios de comunicación), como han cambiado los tiempos, ahora sale un jugador por día a la rueda de prensa, sale el que decide el club y no hay ni entrevistas individualizadas ni te molestan para nada. 

Pues bien, en nuestra época te llamaban día si y al otro también. A la hora de comer había muchas emisoras que entraban en directo, y claro en Pozito de las Nieves (¿??) éramos 5, así que os podéis imaginar que en las comidas lo hacías por tiempos y casi nunca podíamos comer todos juntos. Al principio descolgabas el telefono, pero claro ya en el entrenamiento te avisaban de que te iban a llamar y que por favor lo cogieras y todas esas cosas, así que no colaba. A la hora de la siesta, a cualquier hora te llamaban, pero claro era su profesión. La prensa tiene mucho poder y en aquellos tiempos y recién llegados no estábamos para exigir. Por la noche igual te llamaban muy tarde ya que los programas empezabzan a partir de las 12 de la noche y después de los partidos te ibas a cenar con los amigos y te pedían el nombre del restaurante donde estarías para llamarte.
Imaginad cenando con tu grupo de amigos y que te llamen a las 11 y 30 de la noche y a veces te tenían en antena muchas veces sin entrar hasta que lo hacías a las 12 y 30 y volvías cuando todos habían terminado. 
Eso lo hacían por la competencia para que no te cogiera el otro, pero era tal la fuerza que tenían periodistas como José María Garcia o José Ramón de la Morena (¿???) entre otros que era muy difícil por no decir imposible decirles que no.




TRAJIMOS LA TXAPELA POR SI HABIA PARTIDAS DE MUS,













COMO VEIS CADA DIA HAC'IAMOS LA CAMA,AUNQUE SOLO POR ENCIMA JAJAJA










4º CAPITULO KASPAROV SETIEN


Muchas veces os preguntáis qué tipo de vida llevan unos chicos que son futbolistas. Nosotros no hacíamos nada que no hiciese un chico de nuestra edad, después de comer echábamos la siesta, luego a hacer la compra al centro comercial, allí con nuestro carrito y más tarde a tomar algo por Las Rozas. Pasábamos muchas horas en la inmobiliaria con nuestras amigas, eran unas chicas fantásticas (que nadie piense cosas raras, lo digo por los mal pensados que piensen que teníamos algún tipo de interés en ligar o cosas parecidas). Es más, creo que a partir de aquel momento todos los futbolistas que fichaban por algún equipo de Madrid pasaban por esa inmobiliaria y aún hoy seguimos manteniendo esta relación. Gracias chicas por toda la ayuda y por hacernos la vida mas fácil, ya que ante cualquier problema solo tenías que llamarlas y ellas te lo solucionaban todo.

También íbamos a casa de Quique Setién, era un enfermo en el buen sentido de la palabra del ajedrez. Tenía una computadora y se pasaba horas jugando a este juego, y claro me vició un poco (compré la computadora) y empecé a rememorar aquellas partidas de mi juventud. Quique leía libros y empezaba a decirme que si era una defensa siciliana o francesa y decía nombres que no había escuchado en mi vida o esta es la jugada del jaque mate al pastor que es para principiantes. Era un crack y por supuesto me ganaba aunque me picaba para ganarle alguna partida. Creo que incluso le hizo tablas a Kasparov en una partida simultánea de esas que juegan los maestros.

Siempre se piensa que al ser un futbolista famoso sales cada noche de juerga, lo digo porque es una pregunta que me hacen con cierta frecuencia. Nosotros solo salíamos después de los partidos y algún jueves que nos íbamos a Madrid a tomar algo pero siempre era un refresco o cerveza y rápido para casa. Solo después de los partidos sobre todo si eran en sábado nos quedábamos más tarde. En este aspecto, siempre me he cuidado aunque más de uno hace comentarios sin fundamento,sin tener ni idea y sin conocerme en absoluto. Ya os iré contando anécdotas al respecto sobre estos temas, pero la gente habla sin conocimiento de causa.
No es porque ya no esté entre nosotros, pero hice mucha amistad con Arteche, compartía habitación con él en muchas concentraciones, se portó de maravilla con nosotros, aconsejándonos en muchas cosas y poniéndonos al día en todo lo que al club se refería. Me invitaba a su casa, era un tío campechano, sincero, un recuerdo a este jugador que tenía fama de leñero y era un trozo de pan.












GRACIAS CHICAS POR ESOS MOMENTOS,POR VUESTRA PACIENCIA,POR VUESTRAS ATENCIONES ETCETC

EL UNICO PERO ES QUE ERAN DEL REAL MADRID Y MUY FOROFAS JAJAJA








CAPÍTULO 5: Otra final sin ser titular

La temporada fue movidita,ya que el entrenador Luis Aragones lo dejo por una enfermedad en la pretemporada cogió el equipo Vicente Miera que duró 13 partidos, luego Martínez Jaro que estuvo de la 14ª jornada a la 25 y después volvió Luis Aragonés hasta el final. Recuerdo que fue una campaña extraña, había 18 equipos en Primera División y aquel año se clasificaban los 6 primeros para jugarse la liga, los 6 del medio creo que no se jugaban nada y los 6 últimos el descenso. 
Quedamos los 7º y tuvimos que jugar en el segundo grupo,vaya año pensaba con el equipo que teníamos y encima perdimos la sexta posición en el último partido jugando en casa contra el Barça,otra noche para olvidar pero pensaba aún nos queda la Copa del Rey 

Yo pienso que era el jugador mejor pagado de la plantilla y venía de jugar un Mundial, el de México 86, pero eso no me aseguraba la titularidad. En un equipo como el Atlético sabes que la competencia es grande (Uralde, Silva, Llorente, Rubio) pero hubo momentos en los que estaba enfadado. La verdad es que muchos, ya que no me sentía titular, con esa confianza que te da el entrenador. 

Jugué 38 de los 44 partidos de liga, 27 como titular, 20 completos, y un total de 2.614 minutos, pero la verdad es que no me sentía a gusto. Fui el máximo goleador del equipo con 15 goles en liga, Marina marcó 11 y luego Uralde y Silva con 8, pero por dentro sentía que me faltaba algo. No os quiero ni contar lo mal que lo pasé cuando en las semifinales de Copa contra el Real Madrid no jugué de titular en ninguno de los partidos y claro ni contaros tampoco cuando vi que no jugaba de titular la final contra la Real Sociedad. Otra final que me perdía, ya que también me perdí la del año 84 del Athletic contra el Barça,después jugué mi única final hasta ese  momento la del año 85 del Athletic contra el Atletico .
En definitiva con la mosca detrás de la oreja ya que no fui titular en esa final que se disputaba en Zaragoza como no lo fui en las semifinales contra el Real Madrid y para rematarlo encima perdimos la final a los penaltis,en esa final salí en el minuto 56 sustituyendo a Marina con el resultado de 2 a 1 ,al final conseguimos empatar a 2 con gol de Rubio en el 74,vaya día,otro palo, 
ya que en mi vida había disputado 3 finales,la de juveniles contra el Real Madrid que perdimos 2 a 1 con aquel gol tan famoso de Michel que entro por fuera de la portería,luego la que os he comentado del año 85 que aunque marque un gol perdimos 2 a 1 otra vez el mismo resultado en este caso contra el Atletico y con un penalti que nos señalaron por manos de Urtubi cuando salto en un córner y no toco el balón sino que pego en el travesaño y en esta ocasión a penaltis,me preguntaba estoy gafado? jajaj ya que la única que ganamos fue la que no juegue ,la del 84 aquella de la tangana con Maradona,en fin fuera de estas anécdotas lo que estaba claro es que aquellos días se hablaba más de Jesús Gil y Gil, que sería el nuevo presidente y que venía con Paolo Futre como estandarte, que de la propia final. Parecía que no fuera importante.


SEGURAMENTE LAMENTANDO EL RESULTADO Y VIENDO QUE SE NOS IBAN LAS POSIBLIDADES DE METERNOS EN EL GRUPO QUE ASPIRABA A GANAR LA LIGA


EN EL CALDERON CONTRA EL ATHLETIC CON MI HERMANO PATXI












CON UN GRAN AMIGO DEL ATHLETIC,LUIS DE LA FUENTE EN EL PARTIDO EN EL CALDERON










CAPÍTULO 6: Gil, Menotti, Futre… y Eusebio

Se me van mis compañeros de piso, Uralde ficha por el Athletic a cambio de Goikoetxea y Rubén se va al Valladolid. Y llega todo el arsenal con Jesús Gil y Gil, Futre, Goikoetxea, López Ufarte, Marcos, Eusebio, Juan Carlos,Elduayen, Parra… y de entrenador César Luis Menotti, con su segundo, Rogelio Poncini. En solo un año el Atlético cambió por completo. Si antes os decía que era el mejor pagado ahora pasaba a la zona media, aunque solo me preocupaba el poder triunfar en ese gran club e intentar conseguir títulos, pero sobre todo que mi situación mejorara y me sintiera más titular. Me pasaba igual en la Selección Española: jugaba, me convocaban siempre pero se comentaba que no encontraban a la pareja ideal de Butragueño, buscaban sustitutos por todos los lados, pero al final siempre jugaba.

Me comentaron para venir a vivir conmigo Eusebio Sacristán y Juan Carlos, ya que su representante era el mismo que el de Uralde y Rubén (Miguel Santos). Yo encantado de seguir con nuestra rutina en Pozito de las Nieves, con todos mis amigos , pero mi vida cambio un poco ya que tanto Eusebio como Juan Carlos se marchaban a Valladolid casi todos los fines de semana después de los partidos, ya que solo tenían una hora y como comprenderéis la familia tira y más cuando tienes novia.

Fuimos a Marbella con Jesús Gil y Gil en pretemporada, todos trajeados, impecables, elegantes, a la primera fiesta de la Jet Set. Allí estaban todos los famosos de ese mundo y nosotros entre ellos. A mí me caía bien Jesús Gil, como dice un amigo mío no analices a los amigos con sus defectos porque te quedaras sin ninguno ya que todos tenemos defectos o diferentes maneras de pensar o de ver las cosas o de actuar. Él quería conseguir títulos rápidamente y pensaba que seria fácil. En aquella época tenía problemas con los políticos y nos decía: ‘Vosotros no os preocupéis por nada, dejármelos a mí, vosotros solo ganar y ganar’. 

Menotti era un buen entrenador. Venía con la fama de que entrenaba por las tardes para poder dormir por la mañana (eso se decía desde Barcelona). Nosotros entrenábamos siempre por la mañana. Siempre recordaré lo de “achicar espacios”, lo de “jueguen para sus seres queridos”, y luego comentaba que siempre se puede dar más: “No piensen que están cansados, imaginen que están fundidos y se quema su casa y en ella están sus seres queridos a que sacarían fuerzas de cualquier lado”. Es verdad, aunque se pueda pensar que es un ejemplo llevado al límite.

Lo echaron en la jornada 29. Luego vino Ufarte tres partidos, luego Briones y en las ultimas jornadas aunque figuraba de entrenador Briones ya estaba Maguregui. Fue un año duro ya que cada semana había reunión, quedamos terceros y prácticamente durante toda la temporada estuvimos en segunda posición, pero el Real Madrid ganó el campeonato y Jesús Gil no lo soportaba. Eran reuniones como en el colegio, él estaba en una mesa y nosotros escuchándole que si no habíamos entendido lo que es una empresa, el concepto de la empresa, algunas veces se refería a jugadores que estaban pendientes de sus negocios. Un día hablando conmigo me decía que yo podía hacer muchas cosas a la vez y pensar en distintas cosas pero compañeros como Eusebio se despistaban con facilidad. Este comentario también me lo dijo años después Johan Cruyff con respecto al programa de televisión ‘Fantastic’ y a las cosas que hacíamos con el grupo.

A lo nuestro, todos queríamos ganar, además sabíamos que si lográbamos ganar la liga el ‘presi’ nos daría todo. Me acuerdo del día que ganamos en el Bernabéu POR 0 a 4, Jesús Gil estaba feliz, nos decía: ‘Dejarme disfrutar de este momento ya que no sabéis realmente lo que habéis conseguido’. Y eso que solo habíamos ganado un partido, pero hasta que no estás dentro no te das cuenta realmente de la rivalidad que hay 

























CAPÍTULO 7: Del Athletic al Barça

Después de mi marcha del Athletic hubo muchos momentos en los que estuve a punto de volver. Uno de ellos fue sobre febrero-marzo de 1988. El Athletic se puso en contacto para intentar hacer otro trueque como el que había hecho un año antes (Goikoetxea x Uralde) y en este caso se habló de Biurrun x Salinas. Me llamó el gerente del Athletic, Fernando Otxoa, para ver si estaba interesado en volver. Yo estaba bien en el Atlético, es un gran club pero estaba cansado de tantas reuniones y cambios de entrenador y la situación iba a peor. Le dije que estaría encantado de volver, pero comenzamos mal, ya que me empezó con el cuento de la lechera, que si lo que ganaba en el Atlético la mitad o sea el 50% para Hacienda, el 10% para alquiler de piso, el 20% para comer, el 10% para gastos varios (teléfono, luz, gasolina…) y que en cambio en el Athletic aún ganando menos me compensaba ya que solo seria el 50 % de Hacienda ya que vivía en casa.
Le dije que quería ganar lo mismo que en el Atlético, ni mas ni menos, y así quedo la cosa. Pero el Athletic se quiso aprovechar del Atlético ya que un año antes le había salido bien la jugada de Uralde por Goikoetxea, y además creo que algo de dinero, y quiso forzar para que el Atlético pagara alguna cantidad. 

El entrenador era Briones pero ya estaba firmado Maguregui para la temporada siguiente, así que le comunique a Maguregui mi intención de irme a jugar al Athletic. Él no me puso ningún impedimento, al revés, me dijo que le parecía perfecto pero que el quería que el cambio fuera por Andrinua. Así estaban las cosas, pero como os dije antes el Athletic quiso forzar demasiado y el presidente Jesus Gil y Gil me dijo a ver si no me importaría ir a otro equipo ya que el Athletic se había subido a las barbas y que una vez ya le habían engañado pero dos veces era demasiado ya que se querían aprovechar y que no pensaba cambiar un delantero de 25 años e internacional que ademas  había jugado el Mundial 86 e iba a disputar la Eurocopa de Alemania’88 y encima le pedían dinero. Es normal que estuviera enfadado y me decía que ya le habían engañado una vez y que en esta ocasión no picaba. Le pregunté el equipo y vaya sorpresa… ¡Era el Barça! ‘Presi, nadie puede decir que no a un equipo como el Barça’. 








CAPÍTULO 8: Mi fichaje por el Barça

Faltaban 3 partidos y jugábamos en Valencia. Nos llamó a Eusebio y a mí y nos dijo que había técnicos del Barcelona para vernos en acción. Ganamos 3 a 4, no marqué, me sustituyeron en el minuto 66 y creo que no jugué un buen partido, pero nos llamaron porque querían negociar con nosotros. Así que allí fuimos Eusebio con su representante Miguel Santos (el intermediario que me vino a buscar para llevarme al Atletico de Madrid ) y yo, que cuando llegué al Atlético me puse en contacto con una empresa de intermediación y representación de deportistas, Dorna,  que era una multinacional. Lo hice para que me buscaran sponsors, botas… pero viendo que no me consiguieron nada de nada decidí rescindir ese contrato y llevar personalmente las negociaciones. 

Así que allí estábamos los 3, mientras que por parte del Barcelona vino Ramon Martínez, al que Eusebio conocía de su etapa en el Valladolid. El primero en entrar fui yo, me senté, le saludé, hablamos un minuto y cuando me dijo la oferta me levanté, le dije si era una estrategia para ir regateando o algo parecido y me respondió que era lo que había y que tenía que ser en esos términos. Me despedí, le dije que encantado pero que en esos términos era imposible. Salí de la habitación, fui a buscar a Jesús Gil y le dije que mirara otra opción pero que esa no podía ser. A los cinco minutos, me pasaron una llamada de Joan Gaspart, vicepresidente del Barcelona, una persona que influyo no solo para que firmara por el Barça en aquel momento sino para que en 1992 renovara, pero eso ya os lo contare en el episodio del Barça. En un segundo ya era jugador del Barcelona, no me lo podía creer, en un minuto había cumplido un sueño jugar en uno de los mejores equipos del mundo, el Barcelona, con un contrato por 4 temporadas (me quedaban 2 con el Atlético). 

Siempre hay un momento en el que piensas ‘igual me he quedado corto’, pero yo estaba muy contento ya que mejoraba mi contrato e iba a un club en el que cualquier jugador desea jugar. Es verdad que en esa época tenia problemas (hotel Hesperia) pero eso corresponde a otro capítulo. Al rato salió Eusebio de la reunión con Ramón Martínez y también firmo con el Barcelona. La operación se valoró en 300 millones y Carlos, un jugador que había jugado en el Oviedo. De esos 300 millones, 250 millones se pagaron por Eusebio y 50 millones por Salinas, ya que yo era jugador del Atletico y Eusebio pertenecía a Jesús Gil. Pero a mí ese tema no me importaba lo mas mínimo, como si quisieran ponerme valor 0.

Siempre se ha comentado que quien recomendó los fichajes del Dream Team, Bakero, Txiki y Rekarte de la Real Sociedad, Valverde y Soler del Espanyol, Salinas y Eusebio del Atletico, fue Javier Clemente. Yo se lo pregunté unas cuantas veces y nunca me dijo ni sí ni no pero su sonrisa lo decía todo así que apostaría un riñón a que Javi tuvo mucha influencia en aquellos fichajes.




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CAPÍTULO 9: Arteche y Luis

A nivel personal, esa temporada 87/88 había jugado más, 37 partidos, 36 titular, 19 completos, 2861 minutos y 16 goles. Fui el máximo goleador del equipo, por detrás López Ufarte y Futre con 8 goles. No tenía competencia, ya que Silva y Uralde se habían marchado y era el único delantero centro. La verdad es que nunca supe cuál era el problema, ya que era muy joven, tenía 25 años, era titular del Atlético y de la Selección Española, había sido el máximo goleador del equipo en esos 2 años con 15 y 16 goles en liga respectivamente y sin lanzar penaltis, algo muy importante para cualquier delantero, ya que te asegura unos diez goles cada año. Alguno dirá que hay que meterlos, por supuesto, pero en un equipo de los de arriba son de 5 a 10 penaltis como mínimo cada año, acertando en un 80% son muchos goles. Por eso no entendía que no me quisieran y que desearan traspasarme a un equipo (Athletic o Barcelona) o a cualquier otro que me quisiera. Tal vez porque era un fichaje de la anterior directiva. No lo sé, pero lo que está claro es que no entraba en sus planes, así que creo que acerté tomando otra decisión rápida.

Recuerdo que en esa temporada fuí convocado para jugar con la Selección de Euskadi fue un 11 de Mayo del año 1988,jugábamos contra el Tottenham y me puse como una moto,que mosqueo cogí cuando ví que no estaba en el once titular,era el mes de Mayo yo era titular en un equipo como el Atlético y titular en la Selección Española,venía de Madrid,estaban a punto de dar la lista definitiva para la Eurocopa de Alemania (1988)a la que tenía muchas posibilidades de ir, y me preguntaba,si el seleccionador ve que en la Selección de Euskadi no me ponen puede pensar que esos son mejores que Salinas,jugaron Bakero y Uralde,y nunca olvidare ese día en el que Iribar y Exposito que eran los entrenadores no me pusieron ,ni tampoco mi cara ya que estuve a punto de marcharme y dejar la concentración.
AL final ganamos 4 a 0 jugue la segunda parte ,marque un gol y fui convocado para esa Eurocopa,es decir todo quedo como una simple anécdota,aunque si es verdad que nunca olvidare ese mal trago que pasé.

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Me gustaría acabar mi historia del Atlético homenajeando a dos símbolos como Arteche y Luis Aragonés. Del primero, decir que era trozo de pan, un gran compañero, un atlético de verdad, con todo lo que pueda decir me quedaría corto. ¡Cuántas veces me acuerdo de ti, amigo! Y de Luis, que fue el que recomendó mi fichaje, que no tuve la suerte de estar el tiempo necesario para conocerle a fondo, pero que su recuerdo siempre estará no solo en la mente de los atléticos sino en la de todos los que amamos este gran deporte llamado fútbol.













10 comentarios:

  1. Respuestas
    1. maravilloso julio!me saco el sombrero.podemos todos aprender del bayern q disfruta de sus pesos pesados estilo hoeness.beckenbauer.rumenigge.breitner...dentro del club y siendo buques insignia en el club bavari mientras que acá en lugar de atraerlos los expulsamos ..en fin nadie es profeta en su tierra...pais!!!!q diría forges...bravo julio ..has conseguido emocionarme!!!un abrazo

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  2. Muy interesantes estos articulos, quizá mi ansiedad por conocer las interioridades de ese Athletic campeón hace que incluso se me quede corto pero, aun asi, genial. Es interesante conocer cómo fueron los comienzos no ya solo tuyos Julio, si no para poder hacerse una foto de cómo era el futbol en esa época, de cómo era Lezama y sus equipos. No dudo que en la actualidad, los jugadores en Lezama mantengan tan buenas relaciones, incluso, sean amigos, ya que en la adolescencia los lazos afectivos mas fuertes junto con los familiares, son con los amigos. Pero leyendote, creo q el compañerismo y la amistad de esa epoca serian mas intensos donde, creo, esa ansiedad y ganas por competir y subir peldaños en el equipo de tu ciudad, de tu tierra, de tus amigos,en definitiva, de los tuyos, estaban mas agudizadas.
    Reitero, quizá echo de menos mayores detalles y mas vivencias de las temporadas que viviste pero, aun asi, leerte e imaginarte tus ilusionantes trayectos con Goiko o Villar o tus ratos con el Txopo hacen que retroceda en el tiempo, ese tiempo en el que todos en mi barrio queriamos jugar en ese Athletic, en ese San Mames. Aupa Athletic! Con ganas de mas capitulos. :-)

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  3. Julio, buenísimos estos artículos, como aficionado del Athletic es un lujo leer estas interioridades de aquel Athletic campeón y que me marcó para siempre, también quiero decirte que a mí no me tienes que explicar nada de porque te fuiste, aunque me dio mucha pena pues eras el futuro del Athletic, lo entendí perfectamente como ahora entiendo a Llorente, y sé que te hubieras quedado cobrando menos que el ATletico pero estos no cedieron, fue una verguenza...en cambio vendieron a Zubi al Barca como si fuera un héroe porque el Barca nos fichó a Biurrún....Al final toda la experiencia vital que has tenido en todos los equipos que has estado ha merecido la pena y eres un hombre de mundo, muy envidiado por cierto, de ahí vienen todas las crítica, que te lo has montado de p madre...y que no has aprado de trabajar. Espero con ansiedad los siguientes capítulos sobre el Barca de Wembley, el Depor, Sporting, Japón....

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  4. Ufff, cañerísimo! Justo lo que esperaba, que alguien explique estas cosas, los detalles y las anéctodas. Es interesante, la verdad. Muy parecido a lo que explicaba Michael Robinson en su libro.

    Ansioso por leer sobre el Barça, tu relación con Cruyff (dicen que enfrentamiento porque te gustaba salir por la noche, jejeje). La sensación de marcar un gol en una final Europea, pasar a ser suplente y jugar la final de Champions de titular.

    Cómo viviste las críticas en esa época, ¿afectan al rendimiento? Porque tú, por ejemplo, has recibido muestras de afecto: "el resuelve todo", "abre latas", "tan solo Julio Salinas" pero también muchas críticas. Recuerdo que vuestra época era distinta, ahora el Barça se pasea sobre el 95% de campos que pisa, pero antes estaba todo muchísimo más igualado y que, tú resolvías partidos saliendo a jugar 20 minutos. Por ejemplo, el gol que metiste contra el Rayo en su campo, de espaldas y al caer no saber si había entrado o no. Eres mi ídolo y siempre lo serás, así que estoy ansioso por leer más.

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  5. bravisimooooo julioooo always rojiblancoooooo

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  6. Muy bueno Julio, me ha gustado mucho leer tu historia. A veces vemos a los jugadores como estrellas y no entendemos que hay realmente por dentro de lo que realmente sois, personas. La decisiónde irte al Atlético fue brutalmente criticada, al igual que ha pasado recientemete con Javi martínez (enhorabuena por ese título de campeón de liga) Llorente o Amorebieta. Al final sois profesionales, y esto significa que es vuestro trabajo y vuestro medio para ganaros la vida, así que debéis de mirar siempre por vuestro futuro y el de vuestra familia, aunque eso muy pocos lo entienden. El Athletic tiene como todo en esta vida, y tu lo debes de saber bien, su otra cara en la moneda, todo no es de color rosa, y te lo dice alguien que lleva trabajando mas de 20 años en el club, asi que que cojones, hiciste lo que debías.
    Por cierto, me acuerdo del Kadett, creo recordar que era rojo, y creo que tengo el recuerdo también de una nevada bestial en bilbao, y aquella guerra de bolazos de nieve en Goiko Torre, que tiempos.
    Un saludo de un antiguo vecino tuyo de San Adrian.

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  7. Muy interesante!!! Deseando llegar a la época del Barcelona! Un saludo de una gran fan!!!

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  8. Muy interesante!!! Deseando llegar a la época del Barcelona! Un saludo de una gran fan!!!

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